La disciplina

 

Como bien saben, hermanos, hoy día vivimos en una sociedad ausente de disciplina, educación, principios y sobre todo, moral. 

La juventud, en su mayoría se dedica a las fiestas y borrachera, y el nivel de drogadicción entre los jóvenes en España es el más alto de Europa; a parte, también de que los índices tan bajos de lectura y de fracaso escolar también lo son.

¿Qué quiere decir esto? Que nos enfrentamos a un futuro muy negro, pero siempre hay esperanza mientras haya Fe.

Una gran alegría para todos los católicos fue el éxito de la peregrinación a Covadonga el pasado mes de julio, en la que cientos de católicos, de manera penitencial salieron desde Oviedo hasta Covadonga; demostrando así, y por intercesión de la S. Virgen María que hay esperanza, que hay juventud y que, aunque seamos muy pocos, la Cruz vencerá.

Vuelvo al grueso, por desgracia de la juventud española, sabemos a lo que se dedica en suma mayoría: drogas, alcohol, hedonismo, egoísmo, en definitiva: libertinaje.

¿Y nosotros los católicos qué debemos hacer ante la decadencia de España y de lo que un día fue la Cristiandad?

En mi opinión, los católicos no debemos dar por perdida a la juventud, da igual de la manera que sea: debatiendo con ella, dejándonos ver el público o en últimas, confrontando con ella.

Ya lo ven, el liberalismo (marxismo o capitalismo) se han hecho con el control de todo: universidades, deporte (propaganda LGTBI en todos los eventos deportivos), cine, lugares de ocio (cafeterías, bares, con el cartelito "Lugar LGTBI Friendly" y sandeces por el estilo)

Pero del católico; ni rastro en ningún sitio público. Nuestra opinión e intenciones son claras; estamos en contra de la degeneración total y absoluta de la sociedad y de la juventud principalmente, para ello, el católico debe ser militante y disciplinado.

Antes, precisar que, no somos puritanos protestantes; Dios, nuestro señor multiplicó el pan y el vino en las bodas de Canaá, no es un pecado beber vino o beber cerveza, el pecado está en el grado de embriaguez al que quieres llegar, y si esa bebida es una forma de vida para ti. Debemos (y me incluyo) ser ejemplo para el mundo, de nada nos vale la hipocresía, la degeneración debe ser aplastada, esa degeneración implantada por el diablo corruptor en nuestra sociedad que nos incita a entregarnos a nuestras pasiones; aplastemos la cabeza de la serpiente por Cristo Nuestro Señor.

Un simple ejemplo que quería explicarles: en Rusia, existe un grupo, en principio y según puedo entender por lo que veo y me traducen, suelen ser Cristianos ortodoxos; ¿su misión? concienciar a la población y en especial a la juventud de los peligros del alcohol, la drogadicción y la degeneración sexual. No sé exactamente sus convicciones morales y su estilo de vida, pero sé su ejemplo. Suelen ir a los parques de Moscú en donde la juventud suele hacer "botellón" o suele ir a drogarse; intentan dialogar con ellos, hablándoles de que la ley rusa prohíbe beber en la calle, si ceden, estos chicos les quitan las botellas, las vacían y las tiran a la basuras, en otros casos, se resisten a ceder, en ese caso, llaman a la policía, en otros casos, hay problemas, pero siempre actúan en defensa propia, en post de que esa gente deje a los vecinos del vecindario descansar y se alejen de los vicios; los casos que veo en algunos vídeos son bastante peliagudos y violentos por la actitud de los jóvenes que están borrachos o drogados. Tienen muchos seguidores y la policía siempre les socorre llevándose al borrachuzo de turno.

Si, lo sé, esto es España, si aquí lleváramos un proyecto de esas magnitudes, la policía sería la primera en detenernos a nosotros; aquí hay libertad para drogarse, emborracharse y, también, perturbar el sueño de los vecinos que al día siguiente deben madrugar para trabajar y pagar impuestos para que estos sinvergüenzas sin respeto sigan haciendo el cerdo.

Perdonen mi lenguaje, pero debo llamar a las cosas por su nombre: sí, hoy día la juventud es, como siempre, en mayoría, no toda claro, un vertedero de hedonismo, egoísmo e indisciplina; piensan, por los ídolos que ven en redes y Youtube que podrán imitar a esos "Gángsters" de pacotilla, con su dinero, sus coches, sus mujeres y tatuajes, pero solo se quedarán en la parte de la droga en la mayoría de casos. También tenemos el caso de las jóvenes que, copian de sus otros ídolos: operaciones de estética, culto al cuerpo, sexualización brutal y demás. Ahora está de moda ser "youtuber" de contenido absurdo, simple y mediocre. Algunos lo llaman trabajo, típico de una sociedad débil y ridícula; trabajo es levantarte todos los días a las 6 de la mañana, trabajar de sol a sol para mantener a tu familia, trabajar, en lo que sea pero trabajar. Vergüenza es ver a estos "ídolos" que ganan millones por grabarse ellos mismos mientras juegan a videojuegos, mientras que el trabajador debe soportar penurias para llegar a final de mes y mantener a su familia, si de alguien debe el cristiano que copiar es del esfuerzo y el sacrificio del trabajador, no de niñatos de 16 años y de 40 AÑOS que se dedican a jugar a videojuegos.

Ahora, el mundo "Fitness" está a la orden del día entre la juventud: "debo ir al gimnasio, endurecer el culo para gustar a los tíos; es verdad, también debo estudiar para hacer algo con mi vida y que papá me siga pagando el Gym. Viernes fisio y sábado noche a lucir palmito" os cuento uno de los espeluznantes casos que he escuchado alguna vez en mi vida. ¿Ya está? ¿En esto se basa gran parte de las preocupaciones de la juventud? ¡Basura! Es lo único que puedo decir, solo me parece eso, como joven que soy aún, me produce un tremendo rechazo toda esta jauría de "progreso" y "futuro". El culto al cuerpo es otro vicio, nada que ver con el deporte; el deporte es necesario, sobre todo si son, para los hombres, deportes de contacto, pero el culto al cuerpo es una sexualización del cuerpo de la mujer y del hombre, por eso, hoy es duro pisar un centro deportivo, pero siempre hay gimnasios de boxeo, donde la sexualización es menor, o ir a entrenar por tu cuenta al monte o en casa. Y sobre todo no obsesionarse con la imagen, otro engaño más del diablo que crea el egoísmo enfermizo y degradante que vivimos hoy día.

Tremendas y fatales palabras las de progreso, futuro y también, tolerancia, a cual de ellas más alejadas de Dios. Ya no se amará a DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS Y AL PRÓJIMO COMO A TI MISMO" Ahora es la tolerancia, que quiere decir: "haz lo que te dé la gana, perjudica a quien quieras menos a mí, yo no quiero ni a mis padres, solo a mí mismo"

Creo que el progreso en cuanto a lo espiritual, que es lo único que importa quedó muy atrás.

El católico debe hacer propaganda contra el vicio, el católico debe informar sobre las consecuencias del vicio, el católico debe rezar delante del vicio, el católico debe rezar delante de las discotecas ¡sin miedo, ni vergüenza! El católico DEBE SER COMUNIDAD y, también debe ser comunidad con aquellos que no creen, intentarlo al menos, porque el ser católico no es como muchos hacen o piensan; ser una pequeña comunidad de elitistas privilegiados donde, en ellos se encuentra la salvación.

No, el católico debe salir y confrontar con el mundo, debe ser disciplinado y ejemplo, debe ser un estudiante, debe ser un trabajador, un padre, una madre, un soltero, un sacerdote. Y quizá, algún día, si reunimos los suficientes apoyos y valentía necesarios, podamos llevar a cabo las acciones que llevan estos jóvenes rusos; solo veo en ellos un ejemplo, a pesar de sus imperfecciones. Un niño ve a jóvenes bebiendo en el parque, el banco del parque está lleno de botellas, las risas bobaliconas de ellos, las vestimentas afeminadas y metrosexuales del joven, los vestidos indecentes de ella, ese extraño olor a marihuana que el niño huele, esa imagen que querrá imitar el día de mañana el niño; pues esa basura es lo que no queremos en nuestras calles, esa es la juventud a la cual no pertenecemos y queremos cambiar, y cambiaremos con la ayuda de Dios lo primero, lo segundo con valor y disciplina.

Que aquel que quiera beber se vaya a una taberna o a un bar, o tal vez a casa, siempre manteniendo las formas, que es lo que debe ser. Hemos cedido y seguimos cediendo todo, absolutamente todo al pecado, ahora, hasta la droga (marihuana y cocaína) están más que normalizadas, todos olemos a marihuana por la calle, en casa por el vecino (al menos yo) y eso no lo queremos para nuestros hijos.

Nuestro ejemplo es la peregrinación a Covadonga; aquellos que realizan de verdad militancia católica (rezo del rosario en zona pública, pegada de carteles, mesas informativas, ayudar al prójimo, visitas a orfanatos, conferencias, desinfectar nuestra ciudad de pintadas feministas, marxistas y demás) lo demás son modas que pasarán, pero para Dios, nada quedará en el olvido, porque como saben: PARA DIOS NUNCA SERÁS UN HÉROE ANÓNIMO.

¡Firmes en la Fe!

A.M.O.C